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Brasil y las lecciones para la disputa continental

Por Arturo Ayala del Río

“…en medio de esta confusión indecible y estrepitosa de fusión, revisión, prórroga de poderes, Constitución, conspiración, coalición, emigración, usurpación y revolución. el burgués, jadeante, gritase como loco a su república parlamentaria: ¡Antes un final terrible que un terror sin fin!”

Karl Marx, El 18 brumario de Luis Bonaparte

Publicado: 2018-10-30


Una estrategia de largo plazo 

El triunfo de Bolsonaro es una apuesta desesperada de la burguesía brasileña que, desde el impeachment contra Dilma, ha buscado la estabilidad de la restauración conservadora en Brasil. Luego de ofrecer la presidencia a Temer, del PMDB que acompañó a la gestión del PT por casi 15 años, se inició una persecución mediática y judicial contra su principal enemigo: Lula, cuyo liderazgo supera las fronteras partidarias y representa los principales cambios sociales de la historia de Brasil. Según todas las encuestas, Lula era el único que podía ganar una elección como esta, por ello se evidenciaba la desesperación de la derecha para impedirle participar de este proceso electoral. A esto se debe sumar que desde el extraño “apuñalamiento” que denunció, Bolsonaro tuvo la excusa perfecta para evitar cualquier debate con Haddad. La estrategia estuvo muy bien articulada de un momento a otro. 

conmemoración del impeachment contra dilma y del régimen militar por parte de bolsonaro

Bolsonaro: la hipocresía del conservadurismo

Jair Bolsonaro, un ex militar y político de larga data, es un neoliberal que instrumentaliza un discurso autoritario, religioso, populista y conservador. Ha sido diputado desde el año 1990 y hoy es el presidente electo de Brasil con el Partido Social Liberal, el noveno de su carrera política. Recordemos que el año pasado intentó ser presidente de la Cámara de Diputados y obtuvo sólo 4 votos.

Dos de sus hijos han sido elegidos parlamentarios por el mismo partido. Con tres matrimonios en su vida se consagra como “defensor de la familia”, en su lista parlamentaria abundaron los representantes religiosos, ex militares o policías, así como un actor porno, Alexandre Frota, su fiel defensor.

Bolsonaro articula un relato de odio que legitima la agresión contra sectores LGTB, promueve el racismo y la xenofobia, busca la persecución de la izquierda, entre otros. Nostálgico de la dictadura militar, es contrario a los DDHH y partidario de la tortura. Es decir, posiciona un conjunto de insumos peligrosos para la convulsionada sociedad brasileña. Día a día los conflictos se han agudizado llevando incluso al asesinato de activistas de izquierda por parte de sus huestes.

conservadurismo militante con bolsonaro

Monopolio mediático y postverdad

Esto se da en el marco de una sostenida campaña de demolición por parte del monopolio mediático contra el PT, Lula y la izquierda brasileña. Asimismo, se desarrolló, de manera paralela, la difusión de fake news (noticias falsas) por redes sociales y aplicaciones como Whatsapp, para generar miedo y confusión en la población. Todo esto financiado por el empresariado brasileño de manera ilegal. Se inventó, por ejemplo, que Haddad prepara un kit de homosexualidad para niños de 6 años o que había violado a una niña de 11 años, etc. La comunicación formal e informal estuvo, mayoritariamente, a disposición de la derecha.

Hasta o'globo debía salir a desmentir los fake news contra haddad

La restauración neoliberal por encima de todo: La ilusión del “centro político”

Aun así, para conseguir el triunfo electoral ya no era suficiente para la burguesía contar con los partidos que tradicionalmente la han representado como el PSDB, el partido de Fernando Henrique Cardoso, que alcanzó la votación más baja de su historia, 4,8%. El partido de Temer, el PMDB, corrió la misma suerte obteniendo 1,2%. El electorado de estos partidos migró masivamente al conservadurismo.

La derecha necesitaba una plataforma electoral que permita articular los votos de la élite social y económica, de la mano con la pequeña burguesía (clase media) temerosa de perder sus privilegios y un sector de las clases populares; lo que lograrían a través de un discurso conservador y con la ausencia de Lula en el proceso electoral.

Paulo Guedes, el chicago boy encargado de la propuesta económica de Bolsonaro demuestra, una vez más, que el liberalismo económico es el mejor aliado del autoritarismo y las dictaduras. Recordemos que, para implementar, y experimentar, el neoliberalismo en nuestra región, fueron necesarias las dictaduras de Pinochet (Chile) y Videla (Argentina), o la de Fujimori (Perú).

foto: ignacio rojas castañeda (PC de chile)

La expresión política de la lucha de clases

Las ciudades en donde se concentra la burguesía brasileña definieron la elección arrastrando a las clases medias y a los sectores populares conservadores de esas urbes.

Entre los 1000 municipios, más ricos y con el mayor IDH de Brasil, Bolsonaro gana en 967. De las 1000 ciudades más pobres, Haddad gana en 975. Un voto, también, de clase.

Recogiendo la impresión Marx sobre “cómo la lucha de clases creo en Francia las circunstancias y las condiciones que permitieron a un personaje mediocre y grotesco (Luis Bonaparte) representar el papel de héroe”, vemos que la burguesía en medio de la confusión, el caos y el riesgo a los cambios en su statu quo, prefieren: “¡Antes un final terrible que un terror sin fin!”. El fascismo no es más que un instrumento necesario para la protección de los intereses de la burguesía cuando las formas democráticas le son insuficientes para cumplir este objetivo.

EStadao: "Bolsonaro vence em 97% das cidades mais ricas e Haddad em 98% das pobres"

Lecciones de la izquierda brasileña a la izquierda latinoamericana

Los casi 15 años de gobierno progresista en Brasil son una gran cátedra sobre posibilidades, errores y limitaciones de una gestión de izquierda.

Los instrumentos políticos no se pueden reducir a maquinarias electorales, sino deben ser verdaderos entes de movilización social. Desde la izquierda no contamos con los recursos de la burguesía, ni con la influencia de sus medios de comunicación, nuestro aliado será el pueblo movilizado y articulado en torno a la defensa de lo que consideren propio.

No podemos abandonar el trabajo ideológico, muchos de los sectores favorecidos por el crecimiento económico y la distribución de los gobiernos progresistas hoy votan por la derecha pensando que esta puede garantizar su estabilidad y la conservación de lo obtenido. La lucha contra la corrupción debe ser permanente, sin negar que existe una clara penetración en los cuerpos judiciales de los países de la región por parte de fuerzas de derecha.

El papel de los liderazgos sigue siendo fundamental en una región caudillista. El prestigio de Lula, Correa o Cristina superan al de sus estructuras políticas y sociales, eso a la vez es una ventaja y un grave problema, debido a que la articulación de otras candidaturas, incluso con el apoyo de estos liderazgos y bajo el mismo programa, no cuentan con el mismo respaldo social.

A pesar de contar con una candidatura de un mes y medio, Fernando Haddad (Partido de los Trabajadores) y Manuela D’Ávila (Partido Comunista de Brasil) lograron el pase a segunda vuelta y el 45% del electorado, lo cual es una importante base social para lo que se viene. El conservadurismo que hoy ha sido la carta final de la burguesía, es también su condena. La ilusión de una derecha moderna y alternativa al progresismo latinoamericano ha durado muy poco, como lo demuestran Brasil y Colombia. No estamos regresando a la década de los 90´s, los avances de los movimientos sociales van a ser defendidos como sucede en Argentina o Chile. Los sectores populares se decepcionarán del gobierno de Bolsonaro, este es un estado de ánimo que no pueden mantener por un largo tiempo, menos aún sin el cumplimiento de las promesas realizadas en campaña. Así como que en cualquier reforma neoliberal son las clases medias las más afectadas, como lo demuestra el caso argentino. La izquierda brasileña y latinoamericana, hoy tiene una situación compleja y adversa, pero también una gran posibilidad. Con una sincera mirada autocrítica e integral, aprendiendo de aciertos y derrotas, se construirán nuestras futuras victorias.

cierre de haddad en salvador de bahía. importante movilización popular para frenar al fascismo.


Escrito por

Arturo Ayala Del Río

Ciencia Política- Maestría en Sociología UNMSM. Dirigente de Patria Roja.


Publicado en

Blog de Arturo Ayala Del Río

Para reflexionar y debatir.